JEA, EL “RARO” IMPRESCINDIBLE

Por José Antonio Luna

 El verdadero y único homenaje a Rubén Darío es: leerlo, leerlo y leerlo.                                                                             JEA

Jorge Eduardo Arellano Sandino, JEA, (1946, Granada, Nicaragua,) es indiscutiblemente el polígrafo imprescindible de Nicaragua; el Sherlock Holmes criollo que por rescatar el acervo cultural nicaragüense ha visitado bibliotecas y periódicos del mundo en una infatigable búsqueda que todavía no termina.

Doctor en filología de la Universidad Complutense de España, ha escrito más de un centenar de obras. Como polígrafo ha escrito de todo, pero sus obras sobre Rubén Darío son excelsas. Sus trabajos abarcan: poesía, narrativa, pintura, béisbol, teatro, cine, folklore, historia, geografía, periodismo, arqueología, investigaciones literarias, etc.
Poeta bandolero” JEA, se convirtió en la década de los 80s del siglo pasado en referencia cultural para nacionales y extranjeros. Apoyado por el poeta y periodista Pablo Antonio Cuadra, PAC, uno de sus mentores, comenzó su carrera publicando poemas y críticas literarias en el suplemento La Prensa Literaria en la década del 60s. Para el año 1990 Arellano ya era el investigador más conocido y respectado de Nicaragua. Era el investigador polifacético que “tirios y troyanos” reconocían como “especie de avis rara” insaciable ante la literatura, la historia, el folklore, la música, la ciencia, el arte en general.
El historiador Eduardo Pérez Valle en un texto premonitorio fechado en 1971 dice: “henos ante nos un historiador y un poeta; ante un científico y un artista”. ¿A cuál preferimos? Porque ambas facetas nos solicitan con fascinante brillo…”
Polémico, irónico, egocéntrico e intransigente, Arellano Sandino a sus 71 años es innegablemente el dariista más relevante y el heredero de los más renombrados intelectuales nicaragüenses. Sus investigaciones sobre Rubén Darío abarcan los tópicos más diversos; trabajos que han motivado a otros admiradores de Darío-no dariistas- a escribir sobre las diferentes facetas de la vida y obra del bardo Rei. Su incesante producción diariana ha rebasado todas las expectativas de anteriores investigadores porque ha elevado al plano internacional la figura del padre del modernismo e indudablemente ha impulsado la popularización de la cultura nicaragüense.
Creo, que esta declaración de Pablo Antonio Cuadra, PAC, es vital para entender a este “cabezón” nicaragüense que difícilmente será superado en producción y variedad temática. Jorge Eduardo Arellano, fenómeno de nuestra cultura nicaragüense, poeta, crítico, historiador, lingüista, polígrafo, capaz de cansar diez imprentas, de tener en cinta a las nueve musas y de llenar una biblioteca solo con sus obras” (PAC, 5 de agosto de 1989).
Sobre la incansable labor literaria de Arellano Sandino no solo han escrito personajes culturales. El actual presidente de Nicaragua Daniel Ortega Saavedra escribió: “Desde muy joven, Jorge Eduardo Arellano asumió un obsesivo destino: la investigación de casi todas las manifestaciones culturales nicaragüenses, principalmente artísticas, literarias y bibliográficas. Con una enorme capacidad de trabajo, nos ha ofrecido síntesis, panoramas, monografías y miles de páginas impresas fuera y dentro del país que, además de valiosas y rescatar nuestros mayores y menores valores, han fortalecido la conciencia histórica de nuestra Patria.” Daniel Ortega Saavedra, 22 febrero 1990.
Por su parte el laureado poeta del exilio Horacio Peña, autor de “Ars Moriendi y otros poemas” afirma de Arellano que: Nada de lo nicaragüense le es ajeno. Dotado de una inmensa memoria y de una increíble voluntad de escribir y descubrir lo nicaragüense, Jorge Eduardo Arellano levanta y rescata a cada día, día a día, esa Nicaragua, que de no ser por él sería para nosotros una desconocida. Inexistente”.
¿Entonces que le falta a Arellano, o qué no ha hecho todavía, o qué no hizo?
Creo que el destino de JEA ha sido el sacrificio. Arellano es el Ananda nicaragüense que por buscar la iluminación de los nicaragüenses descuidó   su propia “iluminación”. Posiblemente sí se hubiera dedicado de lleno a la literatura -escritor de ficción- ésta podría haberle llevado a la fama mundial y a la fortuna.   Y ¿por qué no a un Nobel o a un Cervantes? 
Tampa, Florida, Febrero 2018.