Por: José Antonio Luna
¡Los tiburones del Cocibolca míticos,
místicos!
misteriosos
regalo de los dioses, del Sol, de la Luna
¡Huracán!
Los tiburones Toro guardianes del San Juan,
hermanos del pez sierra, del Sábalo, de las tortugas…
¡de las sirenas!
¡las enigmáticas caracolas!
¡El escualo y el cocotero solitario en las isletas,
unidos en la eternidad
El tiburón nicaragüense testigo de siglos.
la soledad del manatí,
la tragedia del Sábalo cazado sin misericordia.
El Tiburón de agua dulce, rey del lago,
soberano del San Juan,
no añora el mar…
prefiere
la oscuridad de los manglares de las isletas.
El reflejo de las estrellas en las noches claras
el tiburón y la tintorera jugando
en las diáfanas aguas de Solentiname.
Se reproduce, crece… pero no muere.
¡Inmortal!
Travesías silenciosas desde la desembocadura del San Juan
hasta la bocana del río Tipitapa,
sin prisa
la tempestad de los inviernos, las crecidas del San Juan,
los desbordes de lago.
Los enamorados en las lanchas que surcan el Cocibolca.
Los naufragios, la muerte, la desgracia.
El tiburón
a veces pernocta en las riveras de Chontales
la brisa cálida de las llanuras Chontaleñas
que hacen soñar a Catarrán.
El recorrido por su lago.
La persecución de los aventureros
que venían del este hacia California.
La fiebre del oro y la ocupación de Nicaragua por el Yanqui.
El Tiburón y el dolor del indígena en los días de la Conquista, siempre latente
Los cantos de Cifar.
Bucaneros, banqueros y poetas lo vieron alguna vez
bajar el San Juan
y lo cazaron.
La extinción,
la muerte,
el Apocalipsis.
Alimento del inmigrante que se quedó para siempre
en la dulzura del lago.
del campesino,
del lanchero
del maestro que se enamoró de Morrito,
Morrillo, San Carlos, San Jorge.
La isla de la fantasía con sus dos volcanes:
El Concepción y el Madera
Los pueblos surrealistas de lago, insólitos.
Increíbles, inolvidables.
En otoño disfruta en las bellas caídas del sol, Paradisíacas.
Lentamente el inmenso y eterno fuego da paso a la oscuridad
a la noche,
la Luna.
¡Las puestas de sol en el San Juan maravillosas!
El shark de Nicaragua,
místico
mágico
único
casi extinguido.
¡Un regalo de los Dioses!